viernes, 23 de noviembre de 2007

¿QUÉ DEBEMOS HACER PARA SOLUCIONAR ESTE PROBLEMA?

La solución inmediata es reducir las emisiones a la atmósfera del principal gas que incrementa el efecto invernadero: el dióxido de carbono. Sin embargo, esto no es fácil. Muchas industrias generan este gas, y también la combustión de gasolina o gasóleo en los automóviles produce dióxido de carbono. Además, la tala de árboles reduce la capacidad de nuestro planeta para regenerar el aire, pues las plantas convierten el dióxido de carbono en oxígeno.

La contaminación provocada por la quema de combustibles fósiles está dañando nuestro medio ambiente. Las emisiones de los coches, las casas o las industrias son ricas en un gas llamado dióxido de carbono. Este gas llega a la atmósfera y refleja, de vuelta a la superficie terrestre, la energía solar. Este proceso recibe el nombre de efecto invernadero y provoca un incremento de la temperatura en nuestro planeta.
Los vehículos y las empresas emiten gases contaminantes que afectan de forma adversa a la salud del ser humano, los animales y las plantas y a la composición química de la atmósfera. Las emisiones de dióxido de carbono e hidrocarburos, dos de los principales contaminantes liberados por los automóviles, contribuyen al incremento del efecto invernadero y, por tanto, al calentamiento global de nuestro planeta. La presencia de niveles elevados de estos productos hace que la radiación reflejada quede atrapada en la atmósfera, haciendo subir lentamente la temperatura media de la Tierra.

No hay comentarios: